15.000 Millas En Tabla de Windsurf
Navegar en las aguas heladas del Norte es ya de por sí un desafío. Cuanto mas es hacerlo en tabla de windsurf, en solitario y con lo mprescindible para sobrevivir en un clima despiadado y en aguas en las que una inmersión prolongada significa directamente la muerte por hipotermia. Tal la hazaña de este inglés que ha dado la vuelta a Europa.
Quien emprendió la aventura fue Jonathan Dunnett, un inglés de 43 años, quien en el año 2017 salió del Mar de Barents, en la frontera entre Rusia y Noruega, con la intención de dar la vuelta a Europa en su tabla de windsurf.
Dunnett ya había realizado una hazaña similar al realizar una vuelta a Gran Bretaña, sin embargo quiso ejecutar un proyecto más grande y pensó en Europa. Durante su travesía contó con el apoyo de muchas personas que lo siguieron en su blog y muchas veces se ofrecieron para acogerlo en sus noches de paso. No obstante, aseguró que no siempre contó con la misma suerte. «Conoces a mucha gente, gente muy maja. Pero a veces no tienes a nadie. Si pasa eso, duermo debajo de la vela»,
La travesía de por sí fue complicada y con la dificultad añadida de que la realizó solo, sin equipo de apoyo ni en mar ni en tierra. «Lo quise así porque una de las ideas del viaje era conectar con la gente de cada zona y si vas con un equipo no sería posible; para ir conmigo en el mar no encontré a nadie».
Su recorrido lo llevó por mas de veinte países y la tabla se convirtió en su hogar de día, pues las noches siempre las pasó en tierra.En ella llevó lo básico para subsistir: «Cambios de ropa, una estufa para cocinar, algo de comida, agua, un remo, unas 'crocks' y cosas de seguridad». Un pequeño equipaje que es más que suficiente para disfrutar de ese «tiempo en solitario» que fue una de las cosas que le animó a embarcarse en esta aventura, que tiene claro que le ha cambiado tanto la vida, que sabe seguro que no se adaptará a lo que para otros es la vida normal. Completó su periplo en el 2018, casi un año antes de los dos que pensó serían necesarios para completar su recorrido. El relato de su aventura lo plasmó en su libro "Una ambición a largo término", y en una segunda publicación "In the balance".
«A veces tienes un día duro, pero es como la vida misma, con sus días más y menos buenos. Intento que sea así… Pero sí, estoy contento con todo lo que hice». Una frase sencilla pero que define a un aventurero romántico, tal como fueron otros grandes navegantes.